La joven warao de 18 años de edad, Luciana Moreno, fue hallada sin vida el 4 de octubre, en el caño de Guasina, del municipio Tucupita.
A casi mes y medio del asesinato de la joven warao, sus familiares exigen a las autoridades que les informen los avances de las investigaciones. Su madre Ilcia Morillo, pide que el asesinato de su hija no quede sin ser aclarado.
A continuación, declaraciones de la madre de Luciana Morillo.
“Mi nombre es lIcia Morillo madre de Luciana Moreno. Ese día sábado 01 de octubre de 2022, eran como las 2 de la tarde, el papa y su hermanito se fueron hacia Tucupita-centro. Allá en Tucupita se juntaron con dos más, eran el marido de Luciana y su cuñada, para un total de 5 personas cuando comenzaron a consumir bebidas alcohólicas; eran como las 10:00 de la noche cuando el marido de Luciana decide marcharse del lugar, invitando a Luciana a que se fuera con él, pero Luciana se niega a irse con él, señalando que se vino con el papá y quería regresar nuevamente con él.
El marido no siguió insistiendo y se marchó del lugar, quedando así los tres en el sitio, pero con el grupo se quedó otro más, de nombre Bartolo, y era como las 11:00 de la noche cuando los cuatro emprenden camino hacia su casa, pero el señor se quedó en su casa por el camino, quedando los tres nada más; continuaron su camino y más adelante se encontraron con un grupo de ganaderos quienes ingerían licor, donde continuaron consumiendo licor junto a ellos.
Su papá ya casi no recuerda con claridad cuando se encontraban en ese sitio, pero deciden continuar su camino, apoyándose del uno al otro con su hija abrazados, siguieron caminando hacia su casa, junto con el otro hijo. Eran como las 2 de la mañana, cuando pasaron por el punto de control, donde se encontraban dos guardias, en ese momento la muchacha decide sentarse en uno de los banquillos que estaba allí, entre los dos militares que estaban allí; en ese momento su papá se dirige hacia ella y le ordena a continuar caminando con ellos, pero la muchacha insiste en quedarse y se queda con los dos militares en el lugar. Su papá no le siguió insistiendo a la hija y deciden continuar caminando con el otro muchacho y llegan como a las 5 de la mañana a la finca que actualmente cuidan, ubicado en los Cañitos de Guasina.
Ya en ese día, por la mañana, una vez que descansaron y se levantaron, yo les pregunté sobre mi hija, ellos dijeron que la muchacha se había quedado en el sitio donde estaban los militares, rápidamente mandé a que fueran a buscar a mi hija. Mientras que su papá se levantó y se comunicó vía telefónica con el marido para saber si estaba por allá, donde su marido afirmó que no se encontraba con ella. Entonces le dije a su papá que fuera a buscarla por el centro, rápidamente el señor salió, pero regresó ebrio. Amaneció el día lunes, y como aún no regresaba mi hija, me preocupé mucho, ya quería pasar la información por la radio, sobre la desaparición de la muchacha, pero algunas personas me dijeron que eso no podría servir de nada, que tal vez ella iba aparecer en cualquier momento.
Pero ya el día martes 04 de octubre a eso de las 4 de la tarde, los vecinos vinieron hasta nosotros para avisarnos que las autoridades habían encontrado un cadáver por el caño de Guasina y que por la característica de la descripción podría tratarse de Luciana y bueno, justamente era mi hija, la habían encontrado muerta flotando cuando uno de los vecinos del sector fue a botar unos pañales al caño; en ese momento fuimos a la morgue, pero no nos dejaron que viéramos al cadáver. Al otro día fuimos al CICPC allí informaron al papá que se trataba de mi hija y que supuestamente había dos detenidos por la muerte de mi hija, supuestamente eran los militares que estaban de guardia en la noche, donde mi hija se había quedado del punto de control entrando a los cañitos de Guasina. Pero en realidad no sabemos si lo que nos dijeron en el Cicpc es verdad. Yo como madre, doliente de mi hija, no quiero que se quede así nada más, los responsables tienen que pagar, lo tienen que encontrar, deben ir preso. Y bueno ahora estamos escuchando también que los familiares de los militares quieren arremeter contra nosotros. Nosotros Los familiares de mi hija Luciana de 18 años de edad solo exigimos justicia y que los responsables sean castigados con todo el peso de la ley.”
Luciana Moreno de 18 años de edad, deja un niño de 3 años de edad
Su acta de defunción dice que Luciana presentaba hemorragia subdural, fractura de cráneo. Traumatismo craneoencefálico severo por objeto contuso.
Ya son dos las mujeres indígenas waraos asesinadas en lo que va del año 2022.
La primera fue Irma García de 37 años de edad, madre de 5 hijos, hallada muerta en febrero de este año en las inmediaciones del paseo malecón Manamo de la ciudad de Tucupita, Delta Amacuro. Hasta los momentos ninguna autoridad ha realizado declaraciones sobre el avance de las investigaciones de los dos casos.
